Cualquier tiempo pasado fue mejor

Me habrá invadido la nostalgia, pero me he puesto a repasar la plantilla del Mallorca B, sí el filial, en la temporada 1998-99, es decir cuando se cumplen 20 años. Entonces no competía en tercera división, ni siquiera en Segunda B, sino en la misma categoría que ahora ocupa el primer equipo. Algunos de los jugadores que entrenó Linares durante 13 jornadas y al que relevó después Nando Pons, eran: Leo Franco, Sastre, Rondo, Maldonado, Braña, Pep Lluis Martí, Diego Tristán, Luque, Alvaro Cámara, Miguel Angel Valerón, Alvaro Novo, Jesús Perera o Buades, por citar solo a los más conocidos. Reconocerán que cualquier parecido con los chavales a las órdenes de Julián Robles no admite siquiera la menor coincidencia o comparación.

El ejercicio de memoria viene a cuento tras enterarme de que, en el transcurso de un acto publicitario (si, de esos que los medios regalan para quejarse luego de la bajada de la publicidad), Maheta Molango, en su línea, ha declarado que la clasificación del equipo de Tercera no le importa. Ninguna sorpresa. Desde su llegada la gestión de Son Bibiloni ha sido un puro desastre. Lo único que sale de allí es lo que ya había, incluidos los tres millones que le sacó a Brandon que no le han bastado para equilibrar pérdidas y ganancias en tres balances consecutivos. Claro que mientras los mayores continúen con sus buenos resultados nadie alzará la voz, lo que explica que no se preocupe del resto, pero ojo si en algún momento cambia el ciclo. Los mismos que ahora palmean su espalda, serán sus verdugos.