El último mohicano

Parece que en el Mallorca celebran la gran cantidad de seguidores que tienen en Instagram. Buena noticia. Lamentablemente los goles todavía no se marcan por internet, los partidos no se sacan adelante con el twitter, el narrador del audio de movistar no despeja balones comprometidos ni desde una emisora de fm propia se mejora el juego del equipo. Eso si, cualquiera de estos canales o plataformas sirve a los intereses de transmitir solo lo que a uno le conviene. Es el periodismo que quiere Javier Tebas y que Maheta Molango impone en la única sección, la de comunicación, con periodistas mallorquines. Emitir en castellano abonaría la crítica.

Como contrapartida, Monti Galmés fue el único paisano presente en un consejo de administración. El primer presidente de la era Sarver pasará a la historia como el último mohicano en la mesa de juntas. Valiente como el guerrero Uncas y, eso si, sin nada que perder, advirtió al financiero de Arizona de la mala política del consejero designado y a los dueños no les suele gustar que les afeen sus equivocaciones. Ardo en deseos de leer en EL MUNDO la entrevista exclusiva concedida por Andy Kohlberg, el segundo en la cadena de mando. Seguro que no tendrá el menor desperdicio. Luego ya, cada cual.