Ha empezado el reparto

Todos son iguales, incluso los que pretenden no serlo. Prácticamente no han tomado posesión de sus cargos políticos y ya empiezan a repartir asesorías, direcciones generales o cuanto sea menester para colocar a sus militantes, simpatizantes o amigos. A veces con designaciones tan curiosas como «planes estratégicos» o «transparencia y rendición de cuentas». En resumidas cuentas, pueden gobernar los de izquierdas o los de derechas, al final los mismos perros con diferentes collares. Este es el drama.