Ocón Arraiz en el Mallorca-Ponferradina

De siempre me he interesado por el mundo arbitral, a quienes integrantes admiro por las dificultades de su labor y la incomprensión que sufren. Naturalmente, como en todo colectivo, hay manzanas podridas y de ahí que sea beneficioso analizar sus comportamientos y actuaciones. La primera división se ha librado de los Teixeira Vitienes, de cuyos pésimos arbitrajes he hablado por activa y pasiva en mis intervenciones radiofónicas. Al margen de ello, permitidme que cada semana os cuente algo sobre los colegiados designados para arbitrar al Mallorca.

Este domingo le toca al riojano Ocón Arraiz. Particularmente no me entusiasma porque suele pitar algo tarde y a veces con criterio desigual. No obstante está muy bien considerado por la cúpula y, es más, le dieron uno de los partidos de promoción de ascenso y fué candidato a las plazas que, finalmente, ocuparon el vasco, De Burgos (tras las bajas de Iturralde y Delgado Ferreiro) y el murciano Sánchez Martínez, víctima de atropellos injustos en Las Palmas y Girona.

Ocón es uno de los veteranos de la categoría, a sus 35 años ya cumple su sexta temporada en Segunda. Quedó en séptima posición del Trofeo Guruceta, lo cual no quiere decir nada porque el mejor, Valdés Sánchez, que lo ha ganado por segunda vez consecutiva, continúa sin contar para Sánchez Arminio y su panda.