Un clásico que vuelve

El Sabadell es un histórico en segunda división. Nada que ver con aquel club que llegó a militar en Primera y terminó descendiendo a los infiernos. Los nombres del veterano portero Martínez, o los Izquierdo, Sala , Pini, Isidro, Marañón o el cancerbero menorquín Pedro Capó, en distintas épocas,  pillan demasiado lejos a los aficionados más jóvenes. En definitiva, un clásico que trata de recuperar lo que el tiempo, no el viento, se llevó.

Debutó en la segunda jornada con una derrota en Vallecas, 2-1, pues su primer partido fue aplazado debido a la tardía incorporación de su rival, el Almería. Recién ascendido en el play off express que disputó como tercer clasificado del grupo III por detrás del Castellón, también ascendido, y el Barcelona B. Dirigido por Antonio Hidalgo, que se retiró como jugador hace cinco años en el Cornellá, es su primera experiencia al frente del equipo que ha devuelto a Segunda tras una etapa en Grecia como segundo del AEK Larnaka. Se ha reforzado con varios chavales cedidos por el Athletic, como Undabarrena y Guruzeta y cuenta con los servicios del ex mallorquinista Pierre Cornud, lateral zurdo que estuvo en el Ibiza. No hay mucho más que añadir salvo celebrar su reconquista.

Nada nuevo bajo el sol de Son Moix, el de las cuatro de la tarde. Ya sabemos que Budimir no va ni convocado, sin fecha para el final de su culebrón particular. Un asunto que no merece tanta tinta ni altavoces de última generación aunque de poca intensidad.  Como aliciente, las novedades que pueda introducir Luis García Plaza tras las incorporaciones de Mboula y Murilo.

Arbitra Moreno Aragón, de Madrid. El Mallorca ya se lo encontró tres veces hace dos tempradas. Se complicó mucho en la visita a Palma del Extremadura, con cinco tarjetas por bando y dos rojas, una a Baba y, antes, al central extremeño Aitor Fernández. Los de Almendralejo empataron de penalti en tiempo de prolongación. Luego dirigió el Sporting-Mallorca, 1-0 más de su estilo y el Mallorca-Oviedo, 1-0, con su línea de evitar complicaciones y polémicas. Tiene 30 años y no llama la atención ni para bien, ni para mal.