Bajas poco importantes

Ni la baja de Muriqi, ni las ocho del Barça son relevantes ante el partido que enfrentará a los blaugrana con el Mallorca en el Nou Camp. Las características del kosovar le hacen prescindible en un encuentro de tal naturaleza, más apropiado para explotar la velocidad de jugadores como Kubo o Lee Kang-in. En cuanto a los locales llamaría la atención la ausencia de Dembelé de no considerar la cantidad de recursos a disposición de Xavi en cualquiera de las líneas de su escuadra.

En todo caso las motivaciones son diferentes. Unos quieren asegurar la segunda posición por encima del Sevilla y el Atlético, normal teniendo en cuenta las penalizaciones del tercero y el cuarto al tener que entrar en la previa de la Champions, mientras que los visitantes aspiran a escapar lo más rápido posible de la zona de descenso en la que compiten básicamente con Cádiz y Granada, cuyos resultados conocerá previamente.

Las recientes derrotas culés en casa, precisamente frente a los amarillos y, en partido aplazado, al Rayo Vallecano, invitan a todo tipo de especulaciones tanto intrínsecas como externas. Koeman ha recordado que el equipo estaba en mejor situación que la actual al ser cesado y corre el rumor de que la conexión entre el vestuario y su sustituto no fluye con facilidad. Pero todos conocemos la forma y el fondo del estilo impuesto, que no patentado, tan creador de espacios invisibles como de cederlos al contrincante.

Javier Aguirre tendrá que decidir qué dibujo aplica, si el de tres centrales usado por Sergio González o el de Iraola, más presionante lejos del área. En ambos casos Sergio Rico tendrá trabajo y Ter Stegen no tanto; eso seguro.

El asturiano González Fuertes, de Gijón, 42 años y cinco en Primera, se colgará el silbato. Ha mejorado bastante. El Mallorca se lo encontró en San Sebastián (1-0) y el Barça en le Ciudad Condal con el Betis (0-1). En la cabina de VAR, Iglesias Villanueva, ¡qué miedo!.