Refuerzos o retales

No voy a valorar las incorporaciones de Nacho Vidal y Radonjic a la plantilla del Mallorca por más que conozco al primero por su trayectoria en Osasuna y no tengo ni idea de las virtudes o defectos del serbio. En definitiva lo que sea cada uno tiene que demostrarlo en el campo y sus actuaciones, si las tienen, dictarán sentencia.

Es preciso tener en cuenta algunas consideraciones. El rendimiento de un futbolista no siempre depende solo de él, sino del sistema al que tiene que adaptarse y el juego del resto de sus compañeros. Militando ya en el Barça, Samuel Etoo, que en menudos problemas está metido según las noticias que se difunden, afirmó que quién mejor le había asistido a lo largo de su carrera fue Ibagaza y eso que no cabe recordar junto a quienes se alineaba con la camiseta blaugrana.

El caso contrario sería el de Sergi Darder, forzado a militar en demarcaciones extrañas para él y al servicio de un sistema con cinco defensas que, generalmente, desprecia el centro del campo en beneficio de un fútbol más directo que le sobrepasa y, desde la distancia, deja la sensación de sentirse mentalmente afectado al no aportar lo que se esperaba de él.

El de Artá no es hombre para jugar en una u otra banda, como no lo es tampoco Morlanes al que Aguirre, empeñado en su quinteto defensivo, colocó ante el Betis a la espera de que los laterales ocuparan carriles imaginarios. Un partido trascendente, quizás aun no trascendental, tirado de la peor manera. No pongo en solfa los méritos del técnico con un vestuario que no está hecho a su medida ni en tiempo ni en forma. Ahora veremos si las incorporaciones invernales habrán hecho de la necesidad, virtud. Modismo en uso.