Cada maestrillo con su librillo
Cada maestrillo tiene su librillo, eso dicen, y Vicente Moreno reproduce en el Mallorca, punto arriba coma abajo, el que supuso el que hasta le fecha es su mayor éxito como entrenador, clasificar al Gimnastic para el play off de ascenso. Terminó la liga en tercera posición pero, sorprendentemente, fue eliminado por el Osasuna que había sido sexto.
De aquel equipo se trajo a varios jugadores: Xisco Campos que estuvo en Tarragona seis temporadas aunque en la última no jugó demasiado, pero si Reina que disputó los 42 partidos de liga, y a Ferrán Giner y Alex López que intervinieron irregularmente en 18 y 15 alineaciones respectivamente. Con el portero de referencia, su equipo tipo estaba formado por Gerard, Pablo Marí, Xisco Molina y Mossa, uno de los destacados, en la zaga; Tejera y Madinda en el doble pivote; Jean Luc y Naranjo, otro que deslumbró, por las bandas; con Emaná por detrás del único delantero centro, Jiménez de la Espada hoy en las filas del Atlético Baleares.
Igual que ahora no le daba demasiada importancia al hombre más adelantado. La columna vertebral comenzaba en Reina y seguía sobre todo a través de Tejera y Emaná, que serían los actuales Salva Sevilla y Dani Rodríguez que, sin embargo, no acaba de entrar fijo en el equipo. Lago Jr hace las funciones de su «Naranjo» particular, que hoy por cierto juega en el Tenerife tras un tiempo desaparecido en Europa.
La idea es muy similar y las variantes, pocas. Pero todos firmaríamos repetir el campeonato que entonces hicieron los catalanes, incluso perdiendo el play off.