Dos cardenales en la «Catedral»

El trabajo de Marcelino García Toral en el Athletic me parece espectacular porque las exigencias que tiene que afrontar no son, por ejemplo, las del Mallorca, ni sus aspiraciones tampoco. De hecho es admirable el Athletic como club, impasible ante el devenir de los tiempos e inquebrantable en su política de trabajar solo con futbolistas de la tierra. Cuna de grandes porteros (Carmelo, Iribar, Zubizarreta, Cedrún y ahora Unai Simón), también lo es de buenos zagueros, Garay, Alexanco,….., bueno dejemos el pasado para los historiadores.

DOS ILUSTRES FRENTE A A FRENTE

Los leones, con mucho cachorro en liza, cuentan con las bajas de Yeray, Yuri y Sancet. Este último una de las prometedoras propuestas en la media punta, como lo es Berenguer en un lado, con la veteranía ya del capitán Muniaín en el otro. Servicio de intendencia para Iñaki Williams, una carga de potencia y velocidad. Ha entrado en la convocatoria Raúl García, experiencia añadida para contrastar con otro ilustre, el almeriense Salva Sevilla. 35 abriles uno, 37 el otro. Desfile de honor en el remozado, bello y glorioso San Mamés, más que una catedral.

DUDAS EN DEFENSA

Pero las bajas de Russo y Raillo, que empiezan a preocupar, suponen un fuerte dolor de cabeza para Luis García Plaza que se queda solamente con dos centrales: Valjent y Sedlar. Necesita una escuadra de fajadores por si toca sufrir, pero los zurigorri también deberán tener cuidado con la rapidez de Kubo y el martilleo de Dani Rodríguez porque una visualización previa dibuja una pelea desigual en la que cada uno puede depender antes de sus propias armas que de neutralizar las del adversario.

Arbitra Figueroa Vázquez. Subió a Primera hace tres temporadas, para mi sorprendentemente, pero no es un mal árbitro. Este sevillano de 41 años es mejor que al menos media docena de sus colegas. No es muy tarjetero, lo cual dice mucho a su favor. Los mallorquines le recordarán porque pitó el partido de vuelta de la primera promoción de ascenso en el campo del Albacete.