El más común de los sentidos

El Mallorca ocupa una posición envidiable desde la que es más fácil alentar sus perspectivas que lamentar sus deslices. Sin embargo que el momento no sea propicio, no impide que podamos proponer ciertas reflexiones o algunos debates. Probablemente asuntos de menor calado que su privilegiada clasificación, pero no por ello menos curiosos o de cierto interés.

Insistamos en que Javier Aguirre mantiene en su haber el mérito de conjugar una plantilla sin estrellas y convencerla de sus posibilidades al persuadir a los jugadores de cómo y hasta dónde pueden dar de sí. El técnico brasileño Luis Felipe Scolari, que manejó a las selecciones de su país y de Portugal entre otros equipos, afirma que «no puedes tener estrellas en un gran equipo, solo buenos jugadores» y aún siendo evidente que el mejicano no cuenta con ninguna de las primeras y pocos de los segundos, su filosofía ahonda en este concepto.

Ha trascendido que en el mercado de enero pidió un lateral zurdo, un defensa central y un medio. Se los trajeron, pero salvo la alineación forzada  de Augustinsson en Sevilla y unos minutejos para Morlanes, no se puede decir que ninguno de ellos haya entrado en la primera lista de recursos. A mayores llama la atención que con cinco centrales -Dennis, Valjent, Raillo, Copete y Nastasic- tenga que terminar por colocar a un lateral, Gio, en aquella posición.

Pero, repito, la situación no favorece la apertura de interrogantes al respecto, pues el signo imperante de no cambiar las circunstancias, es el de admiración porque. aunque el sentido común no esté de moda, siempre hay que volver a imponerlo.