¿Luz al final del túnel?

Frecuentemente en mi profesión hay quien se tome las críticas a título personal. Permitan que abuse de la confianza con mi colega y, sobre todo, amigo Emilio Pérez de Rozas (lean el reportaje que publicará el lunes en El Periodico de Cataluña) al recordar lo que al respecto decía su padre: «No era mi intención ofenderte, si lo he hecho, lo siento. Pero no dudes de que cuando de verdad quiera ofenderte, te enterarás». Se me quedó en la mollera. Por cierto, cuando el presidente de la Federación de Fútbol de les Illes Balears apoya el ascenso automático del Atlético Baleares en caso de que no se reanude la temporada, entiendo que incurre en agravio respecto al Ibiza, segundo clasificado solo dos puntos por detrás de los del Estadio Balear y que, si no me demuestran lo contrario, figura inscrito en la misma Territorial que dirige Miquel Bestard. Sin olvidarme de la Penya de Santa Eularia, por deferencia a otro amigo mío: Labi Champions, alias «El Conseguidor».

Al grano. La Universidad de Tecnología y diseño de Singapur, lugar de nacimiento del presidente del Valencia, Peter Lim, ha elaborado un estudio basado en la evolución del Covid 19 en cada país y vaticina que España estará libre del bicho a partir del 5 de agosto. Tanta precisión me abruma. ¿Por qué no el 2 o el 5 o el 4, que es mi cumpleaños?. Da igual. De ser así los jugadores podrían disponer de vacaciones todo el mes de junio, empezar a entrenar a mediados de julio y terminar las competiciones inacabadas en agosto y septiembre. La temporada 2020-21 empezaría a mediados de octubre y solo habría que apretar un poco el calendario, por ejemplo sin parar en Navidad y con algunas jornadas intersemanales, para acoplarse al vademécum habitual. Esta opción mejora la propuesta de Casillas y quita un peso de encima al ministro de Sanidad, con permiso de Roures y Tebas. ¿O no?.