Sansó, calienta que sales

No que el beso sea lo de menos, para nada, sino que cabe añadir el gesto grosero, impúdico, de mal gusto y pésima educación, del presidente de una federación deportiva, en este caso la de fútbol, echándose mano a los testículos en un palco de autoridades, fuera en presencia de la Reina Leticia y la Princesa Sofía o sin ellas. Ya solo por eso, Luis Rubiales debería hacer algo más que pedir disculpas «inadecuadas», como le acaba de pedir el mismísimo presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, que en período previo a una incierta investidura no debe estar para que le creen problemas.

Con algunos asuntos pendientes de resolución en distintas estancias administrativas, desde una demanda por «administración desleal y corrupción en los negocios» a raíz del caso Supercopa-Piqué, hasta la de cinco clubs de tercera división por coacciones y amenazas, las idas y venidas del ex futbolista y mandamás federativo  ante jueces de diferentes instancias han sido constantes.  La presentada por Miguel Angel Galán, máximo responsable de la Escuela de Formación de Entrenadores, en relación a lo sucedido en Australia es la última.

Igual no es baladí recordar que, en pleno ejercicio de sus atribuciones y sin connotaciones legales o reglamentarias, ya desconozco si éticas,  la institución que dirige Luis Rubiales mantiene acuerdos de contenidos con determinados grupos de comunicación para la publicación de reportajes como estos:

«El trabajo que no se ve de la RFEF y las herramientas para que España haya ganado el Mundial» o «Mensaje para todo el que juegue al fútbol: asi es el proyecto de la RFEF para cambiar el concepto de futbolista en España», entre otros textos menos oportunistas para aprovechar el momento.

Al margen de lo que vaya a suceder en días posteriores, que no creo que sea mucho, habría sido interesante conocer la opinión de su colega en la Federación de Fútbol de les Illes Balears, presidida por uno de sus peones: Pep Sansó. Por ahora silencio sepulcral cual corresponde a una estructura de organización deportiva tan obsoleta como piramidal. Agradecimientos aparte.