Si se hace, que se haga bien
Es preciso analizar el fracaso de la convocatoria de público al partido benéfico celebrado en Son Moix entre el Mallorca y una selección balear a beneficio de los perjudicados por ell temporal del mes pasado en Sant Llorença des Cardassar, aun con el debido agradecimiento a los organizadores por la iniciativa.
En primer lugar queda probado por enésima vez que las confrontaciones amistosas no interesan a nadie y que el espectáculo no se da si no participan grandes figuras.
Dicho esto y más allá de las fotos de Molango y Bestard, evidentemente poco atractivos, en sus ruedas de prensa conjuntas, no se diseñó una campaña publicitaria intensa, fiándolo todo al relativo poder de las redes sociales cuyo mensaje depende no tanto de la cantidad de cómo y quien lo difunde. Cuatro tweets, un cartel mejorable y la dedicación de IB3 que, junto a su baja audiencia, tampoco ayudó al anunciar la transmisión diferida del evento aun pagando por sus derechos.
Luego caigamos en cuenta del bajó tirón que tiene el “american Mallorca team”, puesto de manifiesto cada jornada por la escasa afluencia de espectadores a sus partidos de liga pese a la buena campaña del equipo. Y en cuanto a la selección presentada la verdad es que ver a Ximo, Enrich, Bigas y cuatro más, con el refuerzo de algunos futbolistas del Atlético Baleares no constituye un gran reclamo.
Si el objetivo era recaudar dinero para paliar los daños causados por la tempestaden el Llevant mallorquín, haber buscado contendientes de renombre internacional, contratado figuras de primer nivel, algún equipo de primera división aprovechando el parón de las selecciones. En fin algo un poco más atractivo y menos “kumbayá” y decadente que este clásico destinado al naufragio.