Cadena de descuentos

La LFP ha reconocido que los tests efectuados a los jugadores de las 20 plantillas  de primera división y las 22 de Segunda, encontraron infectados a 5 jugadores aunque, según el comunicado, en la fase decreciente de la enfermedad. Se ha especulado con la identidad de los futbolistas que ya han aparecido en distintos medios como Lodi del Atlético de Madrid, Joel, Pedraza y Juanmi del Betis, Remiro de la Real Sociedad y Yangel del Granada, todos ellos con anticuerpos y devueltos a sus domicilios particulares a la espera de una nueva revisión. No hay constancia de que ninguno se saltara el confinamiento, así que cabe preguntarse qué ocurrirá después de los primeros entrenamientos individuales a los que seguirán los grupales. Claro que después de ver cómo se ponen las calles y paseos a partir de las ocho de la tarde, sobre todo sábados y domingos, no nos puede extrañar nada.

Me pregunto si alguien ha reflexionado sobre el perjuicio económico causado a los abonados de los clubs. Salvo el Getafe, que ha anunciado la prolongación de sus derechos a la próxima temporada y el Valladolid, que devolverá parte del dinero, no he visto que se pronunciara nadie pese a que, en el mejor de los casos, quienes adquirieran asientos para toda la campaña habrán recibido un 25 por ciento menos de lo que compraron y, en teoría, tendrían derecho a su devolución.

Lo mismo reza para los operadores de televisión que han cobrado suplementos por la adquisición de los llamados «paquetes» de fútbol ya sea a través de los mismos o de plataformas que los incluían en sus tarifas de teléfonos móviles, tabletas u ordenadores. Ofertas que incluían en su mayoría todos los partidos de liga de Primera y segunda división, Champions League, Europa League, algunas competiciones extranjeras como la Premier, el Calcio o la Bundesliga y la Copa del Rey. Los cargos por dicho concepto oscilan entre los 5 y 15 euros mensuales que, multiplicados por dos meses, hasta ahora, y el número de compradores darían sustanciosas compensaciones económicas por muchos partidos «atrasados» o «históricos» con los que se hayan llenado los canales huecos del contenido ofertado. No tardarán las bajas, ni las reclamaciones. Normal, por otra parte.