Coherencias e incoherencias

Pues bien, puesto a celebrar las elecciones lo más pronto posible y, sobre todo, antes de que Iker Casillas tenga tiempo para preparar su campaña y su programa, Luis Rubiales ya ha obtenido el visto bueno del Consejo Superior de Deportes para convocarlas en cuanto se levante el estado de alarma en vigor. De ahí la coincidencia en emitir una circular en la que la Federación Española indica cómo proceder para disputar los «play off» de Tercera y Segunda A a partir de la segunda quincena de julio. Habrá equipos que, si es que pueden protocolizar sus entrenamientos y afrontar sus gastos, tendrán que competir en pleno mes de agosto. ¡Todo por la silla!.

Entre las ocurrencias del jefe de nuestro Miquel Bestard, figura la comercializar los derechos de televisión de la categoría de bronce. No hay espectadores para los partidos de Segunda y nuestro hombre se plantea vender los de Segunda B. ¿A quién?. Un experimento que ya intentó la asociación Proliga con un fracaso estrepitoso, como era de esperar, pero que alguien debe pensar que en el río revuelto de los próximos convenios televisivos del fútbol profesional, caerá cierta ganancia de pescadores de truchas.

Esto me hace pensar en la incongruencia de las propias emisoras, que transigen en la transmisión de partidos sin público cuando pagan por tenerlo en sus estudios, bocadillo incluido, en sus programas -«Sálvame», «Tu cara me suena», «Operación Triunfo», «Pasa palabra», «Boom», «Late Motiv», etc – y si no lo tienen se graban aplausos y risas en off para que parezca que hay alguien. O sea se aplauden a si mismos y se ríen de sus propios chistes. ¡Qué majos!.

Hoy no me alargo más porque entra tanta coherencia e incoherencia ya confundo las fases con las frases.