Culebrón albanés

S0lo he visto a un jugador imprescindible dentro de un equipo de fútbol: Messi, en el Barça, hace unos años; no ahora en el PSG y nunca con la Albiceleste. Aun así no olvidemos que obtuvo gran ayuda de los Xavi, Iniesta, Busquets, Puyol, etc. Di Stéfano no hubiera sido el mismo sin Puskas, Gento, Santamaría, Kopa o Muñoz y Santisteban. Y si, hay futbolistas que pueden ser más o menos importantes dentro de un once pero, repito, ninguno hace al resto. En este deporte reza el lema todos para uno, pero el uno para todos no pasa de los Tres Mosqueteros. El mismísimo Etoo, rodeado de estrellas blaugrana, reconoció en su momento que nadie le asistió como Ibagaza. Ya ven.

Sea cual sea el final del culebrón Muriqi, no vayamos a pensar que el kosovar es la panacea o que con él los objetivos del Mallorca están cumplidos. Si, va bien por arriba, se maneja más o menos con los pies y lucha hasta los balones imposibles, pero la permanencia no la conquistó solo y por si mismo. De hecho no solo le ayudaron los pases de sus compañeros Jaume Costa, Maffeo, Salva Sevilla y algún otro, sino Jorge Molina al errar un penalti que condenó al Granada o Negredo, quien falló otro que hubiera descendido al Cádiz. No distorsionemos la realidad torticera o interesadamente.

No sé lo que vale el «Pirata», si lo que cuesta. Pero también que sin más incorporaciones sólidas y no experimentales, su regreso no mejora al equipo, entre otras razones porque ya estaba. Aunque es normal que ilusione al aficionado.