El cliente no es la televisión
Los clubs de fútbol se equivocan gravemente al entender que su principal cliente es la televisión. Nada más lejos de la realidad. El público en general y cada afición en particular son quienes mantienen tanto a unos como a la otra y programar, operar y decidir sin atender a sus sentimientos y opinión, les costará más caro de lo que a día de hoy creen.
Hay cosas que han cambiado, por supuesto, pero no todas. Afortunadamente por otro lado. Los fracasos y los éxitos siempre tienen el mismo recorrido. Si los resultados van mal, el primero en caer es el entrenador, después los pitos se dirigen al equipo y final e invariablemente terminan en el palco. Pero si el aficionado entiende que no fallan el técnico ni los jugadores, la bronca se escucha y se siente en los despachos. Y esto es lo que ocurre ahora mismo en el Mallorca.
Alguien ha colado en un digital que Vicente Moreno corre peligro. Desconocemos la fuente y su credibilidad, pero hay quien se lo ha tomado en serio. Los mallorquinistas tienen un alto concepto del técnico y, por el contrario, muy malo del CEO. Particularmente no creo que, por mal que haya empezado la liga, el cuerpo técnico corra peligro pero, si lo tocan, me temo que quien lo correrá será quien tome tal decisión.
Lo sucedido en el Valencia es un claro ejemplo. Peter Lim ha puesto el dinero y ha salvado al club, lo mismo de lo que aquí presumen Sarver y sus socios, pero nadie le quiere. Como al coronel de la famosa novela de García Marquez a quien nadie escribía.