Futbolistas en el desván
El doble duelo «periquito-barralet» del fin de semana se ha saldado con la dolorosa derrota sufrida por los de Arrasate en Cornellá y la más abultada (1-3) de los de Gustavo Siviero en Son Bibiloni,que no han ganado un solo partido de los seis disputados hasta la fecha, a pies del Espanyol B.
El primer equipo completó su peor actuación desde que empezó la liga. Muchos seguidores se preguntan cómo pudo cambiar tanto de una jornada a otra. Quizás no han sido tan diferentes sus actuaciones, el primer tiempo en Valladolid también fue muy malo y en Sevilla la suerte no acompañó al Betis, y ha habido jugadores que se creyeron que la tontería de la Champions iba en serio. Aparte, una mala tarde la tiene cualquiera y no será la única entre las 32 jornadas que restan, aunque también las habrá mejores.
El problema del filial es bastante más grave. No nos caen prendas al repetir que permitir su hundimiento y su evidente falta de recursos, mientras quienes deberían reforzar su estructura y carácter, Marc Domenech y Dani Luna, millón y medio de compra, hacen turismo de aeropuertos, hoteles y banquillo, no se sabe por ni para qué, salvo que tengan que hacer bulto en los aviones y cupo de cara al descuento en los billetes. Hacer la pretemporada para permanecer dos meses sin jugar ni un minuto de competición, excepción hecha de la incipiente participación del más joven en la apertura del calendario, perjudica seriamente el progreso de ambos, su formación y promoción ante la indiferencia de los responsables de la dirección de fútbol en pleno, que presta a la cantera la misma atención que nosotros a la liga indonesia de Tercera.