Honor y gloria, Siviero
Hubo un tiempo, reconozco que ya ha llovido desde entonces, en el que el Real Mallorca tenía que pagar un anuncio, por cierto no muy grande, en los periódicos para publicar o, mejor dicho, publicitar, los precios de sus abonos. Aquella publicidad ha devenido en información por gentileza de los medios de comunicación cuyo gesto no se agradece debidamente.
La presentación de la nueva campaña ha reducido a un segundo plano la renovación de Gayá y Jaume Costa, junto a la baja de Kadewere, quien regresa al club que le cedió. Tres noticias, la verdad, poco relevantes. La del traspaso de Kang in Lee va por su cuenta a la espera de que alguien, algún día y en algún lugar, descubra toda la verdad y nada más que la verdad.
Particularmente creo que la mejor noticia ha sido la de la contratación de Gustavo Siviero como nuevo entrenador del Mallorca B que, lamentablemente, una vez más y por la desidia de sus responsables primeros y últimos, jugará en Tercera Federación, que no es más que la anterior Regional Preferente. El argentino no ha tenido suerte en su carrera como técnico, pero aunque se sentara ocasionalmente en el banquillo del Atlético Baleares, es un hombre de la casa, un profesional íntegro, con conocimientos, amante del club y un ser humano excepcional. Ojalá en la planta noble de Son Moix se diera un poco más de sensibilidad a la hora de considerar, ya no digo valorar, a ex futbolistas, ex preparadores y ex directivos con sentimiento mallorquinista más profundo que el de los propios dueños.