La mejor despedida (1-2 en el Coliseum)

El Mallorca remontó un marcador adverso para lograr su segunda victoria de la temporada en campo ajeno en un partido marcado por la lesión del portero local David Soria, alarmante en un principio, al chocar con Larin las emociones desatadas por la despedida de Javier Aguirre del banquillo balear y la de Jaime Mata de la plantilla azulona. Abrió el marcador Gastón apenas comenzado el segundo tiempo, pero Muriqi empató en el 90 y Maffeo sentenció en el 92.

ALINEACIONES:

Getafe C.F.- D.Soria (1), Djené (1), Nabil (1), Alderete (1), Gastón (2), Luis Milla (1), Maksimovic (1), Greenwood (2), Oscar Rodríguez (1), Risco (1) y J.Mata (0).

Minuto 66, Aleñá (0) por L.Milla y Yellu (1) por Oscar Rodríguez. Minuto 70, Jordi (1) por Djené y Carmona (0) por Risco. Minuto 90, Fuzato por David Soria, lesionado.

R.Mallorca.- Cuéllar (2), Nacho Vidal (0), Valjent (1), Raillo (2), J.Costa (1), A.Sánchez (0), Morlanes (1), J.Llabrés (1), S.Darder (1), Radonjic (1) y Abdón (0).

Minuto 56, Dani Rodríguez (2) por A.Sánchez, Larin (1) por Radonjic y Muriqi (1) por Abdón. Minuto 69, Maffeo (2) por J.Llabrés y Mascarell (1) por S.Darder.

ARBITRO:

García Verdura (2), de Barcelona. Matices caserillos en un lance de guante blanco. Sobraron las tarjetas amarillas a Nacho Vidal, Dani Rodríguez y Javier Aguirre, este por reclamar revisión del VAR en la jugada del gol local. Señaló diez faltas a favor del Getafe y 11, del Mallorca.

GOLES:

Minuto 47, en un cambio de juego, Gastón recibe en solitario pisa el área por el lateral y cruza razo y muy fuerta al palo largo. 1-0

Minuto 91, Dani saca desde la esquina, Raillo cabecea de palo a palo donde Muriqi se anticipa a la zaga y pone la testa muy cerca de la línea de meta. 1-1

Minuto 93, Morlanes saca rápido una falta al advertir la soledad de Maffeo, que aprovecha la sorpresa de los defensores para internarse con velocidad y superar la salida de Fuzato. 1-2

OBSERVACIONES:

El partido estuvo detenido durante 14 minutos al precisar atención Larin y David Soria que chocaron de forma aparatosa en su intento de alcanzar un balón muy largo en el vértice del área. El cancerbero tuvo que precisar los servicios de una ambulancia, aunque acabó abandonado el terreno de juego por su propio pié aunque asistido por el cuadro médico.

9.145 espectadores

EMOCIONES

Después de cada uno de los dos goles a su favor, los jugadores del Mallorca formaron una piña en torno a Javier Aguirre quien, seguramente, no habría podido soñar mejor manera de decir adiós. Una muestra de que su relación con el grupo ha sido mucho mejor que con la que ha mantenido con la dirección de fútbol. Inicialmente probó con un dibujo poco habitual, 4-2-3-1, con el que no logró el control del centro del campo, su primera aproximación al área madrileña no cuajó hasta la media hora, mientras Cuéllar, uno de los homenajeados en detrimento de Greif que ni se vistió, se veía obligado a intervenir ante las constantes amenaza de Greenwood desde la frontal del área.

En otra constante de la temporada, encajar al principio del segundo tiempo, Gastón, lateral lanzado al ataque, abrió el marcador y rompió una zaga sostenida en el trabajo de Raillo y, en menor medida, Valjent, pero débil por los flancos en los que Nacho Vidal y Jaume Costa recibían escasa ayuda y se mostraban remisos en sus salidas. Y ya con el marcador en contra y después de no pocos intercambios de opiniones entre el mejicano y sus colaboradores Toni Amor y Pol Lorente, no tuvo más remedio que cambiar de idea. Del planteamiento inicial pasó a un 4-4-2, mientras Bordalás perdía fuelle con sus relevos y la amenaza del cañonero británico dejó de inquietar a un Mallorca mejor asentado, si bien romo en vanguardia.

El cuarto de hora de interrupción debido al preocupante accidente de David Soria y su imprescindible relevo bajo los tres postes, desconectó al Getafe más que al Mallorca que, en dos chsipazos, le dio la vuelta a un marcador cuya justicia hasta entonces, no se podía discutir. Una vez más tuvimos que recordar a Luis Aragonés cuando afirmaba que «el fútbol es un juego de pillos» y de la pillería de Morlanes, certificada por Maffeo, salió una victoria inesperada y hasta cierto punto sorprendente.

Tras pisar la frontera del descenso, el «Vasco» deja al equipo en décimo quinta posición, lo que permitirá al club ingresar poco más de cinco millones en lugar de los tres y medio de haberse quedado solo por encima del Cádiz. El último servicio del charro tras sus dos años y medio de estancia en Palma.