Mal trago, pasarlo pronto

Si «mal cami passar-lo prest» es no solo un modismo mallorquín sino un consejo sabio, empezar la liga con el Real Madrid enfrente equivale a pasar por el dentista antes de que el dolor de muelas empeore.

Arrasate, la única novedad significativa en la planificación del neo Mallorca 2024-25, al menos por ahora, ha anunciado en rueda de prensa. entre sorbo y sorbo de agua, que lo que se pueda ver no responde a lo que pretende que, más adelante, sea el equipo. En este sentido Ancelotti le lleva ventaja, ya que conoce perfectamente lo que tiene y la capacidad de llevar de desarrollar sus cualidades. Dos ramalazos le bastaron para mandar a la lona al Atalanta en la recién disputada Supercopa de Europa, una final «comme il faut» y no la pantomima de lo que la Federación Española monta en Arabia en pleno mes de enero, ideada por Rubiales y Piqué y no denostada por sus sucesores.

El anfitrión ha tardado un mes en confirmar la venta de Gio, síntoma de dudosa gestión que complica su habilidad dentro de un mercado lento e intrincado. La convocatoria, que Javier Aguirre no anunciaba nunca al jugar en casa, consta de 23 jugadores, con tres dorsales libres (15,16 y 20) que permiten aventurar la efímera presencia de Marc Domenech y Dani Luna, en futuros compromisos. Es decir, están todos los que son aunque no son todos los que están.

El supercampeón continental desplaza a 22 estrellas, como no podía ser de otra forma, menos una. Viene Jacobo Ramón, un defensa central de Valdevebas con el oído atento al postrer fichaje de Laporte si se produce. Su única baja, Camavinga. En una plantilla con recursos como Vinicius Jr., Bellingham, Modric, Rodrigo, Brahim, Arda Guler, sin olvidar a Courtois, quizás el mejor portero del mundo, lo de menos es si va a jugar Mbappé o no. Lo complicado es contrarestar a todos, no a uno solo.

Según el entrenador local terminarán jugando 16 contra 16 a lo largo de los noventa y tantos minutos que dure la verbena, aun teniendo en cuenta que el balón no rodará antes de las nueve y media de la noche. La calor pasa por encima de los horarios.

Naturalmente pita un internacional, Soto Grado, toledano de nacimiento, riojano de adscripción y profesor de educación física en sus ratos libres. O árbitro. Lleva en Primera desde que ascendió el Mallorca la última vez, pues dirigió el partido de ida de la eliminatoria ante el Deportivo. La temporada pasada no se le vio por Palma, ni tampoco se topó con los bermellones fuera de la isla. Al Madrid le ha arbitrado en 17 ocasiones, con 11 triunfos merengues, cuatro empates y dos derrotas que, por supuesto, la televisión de Florentino no ha perdonado.