Nuevo de..Sastre en Cádiz (1-1)

Otra vez dos puntos menos y en el 92. En esta oportunidad por un penalti de alevines cometido por Joan Sastre que había sustituido a Maffeo 10 minutos antes. En la primera mitad Baba había adelantado a los de Luis García Plaza, expulsado, al resolver un lío dentro del área local a la salida de un saque de esquina. Salva y Angel pudieron marcar, también Sobrino, pero en la segunda parte el Cádiz tiró de arreones y el Mallorca, como de costumbre, se olvidó del contragolpe y pagó su excesivo retroceso y sus constantes pérdidas de tiempo que, al final, derivaron en su propio perjuicio.

ALINEACIONES:

Cádiz C.F.- Ledesma (2), Iza (0), Fali (1), Cala (1), Espino (1), Jonson (0), Alex (1), Chapela (1), Perea (1), Sobrino (0) y Lozano (1).

Minuto 45, Chust (1) por Fali. Minuto 60, Negredo (1) por Sobrino y Alarcón (0) por Jonson. Minuto 69, Arzamendia (1) por Chapela. Minuto 80, Osmajic (-) por Iza.

R.Mallorca.- Reina (1), Maffeo (1), Valjent (2), Russo (1), Oliván (1), Baba (2) Salva Sevilla (2), Dani Rodríguez (1), Kang-in (2), Amath (1) y Angel (1).

Minuto 45, Sedlar (0) por Valjent. Minuto 62, Galarreta (1) por Salva Sevilla y Antonio Sánchez (1) por Amath. Minuto 81, Sastre (0) por Maffeo. Minuto 90, Battaglia (-) por Kang-in.

ARBITRO:

Valentín Pizarro Gómez (0), de Ciudad Real. Espantoso. Pitó faltas que no eran e ignoró otras muy claras, entre estas últimas una de Baba a Espino que dejó seguir y terminó con tarjeta roja a Iza por derribar a Dani Rodríguez cuando enfilaba en solitario el camino de la portería. Le rectificaron desde el VAR, tuvo que anular la expulsión y amonestar al mallorquinista. Solamente prolongó 6 minutos cuando en dicha revisión ya se perdieron 5. Expulsó a Sedlar por doble amarilla en el minuto 86, a Luis García Plaza desde el banquillo por decirle al asistente «no nos pitas ni una» y exhibió amarillas ante Alarcón, Cala y Fali, del Cádiz, así como delante de Dani Rodríguez, Baba, Amath y Reina, del Mallorca. Igualmente a Abdón por invadir la zona de revisión  protestándole.

GOLES:

Minuto 29, córner desde la derecha y, tras un rechace la pelota le cae a Baba que fusila desde cerca-0-1

Minuto 93, Sastre derriba a Lozano empujándole dentro del área y Negredo transforma engañando a Reina. 1-1

ENTRE EL QUIERO Y NO PUEDO

Cuando un equipo quiere ganar y el otro no puede hacerlo se producen situaciones extrañas. El Mallorca, muy superior a su anfitrión, estaba mejor situado en el campo y mucho más preciso. Todo lo contrario los de Alvaro Cervera, sin artillería -Sobrino tras el gol de Baba se quedó solo ante Reina y estrelló el balón en sus piernas- sin retaguardia, Fali puede ser un recuperador por delante de la zaga pero nunca un central, y, lo peor, sin guía ni timón en el centro del campo.

Todo lo contrario que el equipo visitante, el cual reencontró en Salva Sevilla a su estrella polar hasta su incomprensible sustitución poco después de una hora de juego que coincidió con un repliegue de sus compañeros hacia el interior de sus murallas resignados a resistir el acoso amarillo a sus dominios. Valjent, tocado, se había quedado en el vestuario después del intermedio, una bicoca para Lozano, controlado hasta entonces y desbocado a posteriori.

Como ha sucedido en anteriores citas, se repitió la historia. Sin brújula, también la perdió el árbitro, no quedaba otra que tirar de resiliencia, palabra de moda, pero ya sin el balón en los pies. Error. Con Dani y Amath, después Sánchez, convertidos en laterales y nunca en extremos, la posibilidad de un contraataque para prevenir al adversario de un disgusto definitivo quedaba a expensas de Kang-in Lee, a la postre también relevado por necesidades defensivas.

Al equipo local no le quedaba nada de su ya de por si escasa pólvora. El partido, interrumpido cada dos por tres, entraba en esa fase de azar, una especie de lotería que el Mallorca nunca debió aceptar. No es menos cierto que Reina, al contrario que sus zagueros, no pasaba apuros, sin embargo algo de razón tiene aquel refrán que nos recuerda que si el cántaro va mucho a la fuente se acaba rompiendo. Y, no olvidemos, que la escuadra bermellona ha hecho añicos ya no menos de cuatro jarros de esos.

Un punto es un punto y más fuera de casa, si, pero el precio de una expulsión, Sedlar y tres lesionados,Valjent, Maffeo y Salva a falta de diagnóstico, sale muy caro para un botín de hojalata cuando la plata se queda en su Tacita.