Oltra contra los fantasmas
La del Tenerife es una afición fiel pero a la vez muy exigente. Puede atestiguarlo Pep Lluis Martí, que cometió el «error» de hacer una gran campaña a su llegada y a la siguiente le exigían poco menos que el play off. Si nos remontamos años atrás podría dar fe de ello el colorado Lusenhoff, que después recalaría en el Mallorca, sobre cuyo coche estamparon un pedrusco de considerables dimensiones. Y las cosas no han cambiado tanto porque se ha gastado un porrón en fichajes y, despedido Etxevarría, le han encargado a José Luis Oltra sacar el máximo jugo a una inversión millonaria que se traduce en los fichajes de Naranjo o Héctor Hernández y el regreso de Nano Mesa después de no prosperar las espectativas que generó su marcha y no logró plasmar en el Eibar, el Levante o el Sporting.
En resumen, hay mosqueo en Santa Cruz. La directiva no se halla satisfecha del aparente resultado de su esfuerzo económico y la incipiente clasificación del equipo ha defraudado las esperanzas depositadas en un campeonato en el que se las prometían más felices. Claro que esto acaba de empezar. Y, por cierto, Nano no figura en la expedición que ha llegado esta tarde a Palma con el ex entrenador del Mallorca al frente. En aquel entonces otra de las víctimas del trío Claasen, Terrasa, Cerdá.
Vicente Moreno podrá contar con Raillo que, casi con seguridad, compartirá el centro de la defensa con Valjent. Por lo demás no cabe esperar cambios. En todo caso ya veremos si Abdón tiene compañía arriba de inicio, si volverá Carlos Castro o el técnico opta por un medio campo más poblado en beneficio de Dani Rodríguez. Nunca se sabe.
Arbitrará el riojano Ocón Arraiz, un árbitro de efímero paso por primera división donde solamente estuvo una temporada. Bajó a las primeras de cambio y desde entonces es su segunda experiencia en Segunda con 38 años de edad. Difícil que vuelva a subir. Tiene o tenía un defecto capital, pita tarde en muchas ocasiones, lo que provoca dudas. Como a todos, cabe desearle suerte.