Salarios y estrafalarios

Si el digital italiano Salary Sport ha podido contrastar las cifras de lo que cobran los jugadores del Mallorca no son las diferencias salariales entre algunos jugadores lo que llama la atención más allá de la generosa ficha de Battaglia, sino que los descartes practicados en el presente mes de enero tampoco representaban una carga excesivamente onerosa, ni su ahorro una vía para invertir mucho en refuerzos. Vamos, que solamente el millón de euros que cuesta la cesión de Sergio Rico por medio año se lleva los que ganaban Lago Jr, Sastre y Febas en toda la temporada. De ahí que Muriqi venga cedido, otro «kilo» por cierto, y el lateral uruguayo Gio González viaje con la carta de libertad. Si algo tiene el agua cuando la bendicen, no quiero ni pensar lo que contiene la no bendita.

Como ya dije, lo mejor del mercado de invierno es que se acaba el lunes a medianoche. A partir de ahí, a apechugar con lo que haya y tendremos tiempo para opinar si lo que veamos en el campo justificaba tantos «tuits», minutos de radio y televisión, tinta y papel o debates en las redes sociales que han enfrentado a tirios con troyanos. Una manera de entretenerse como cualquier otra. Y también, claro, el secretismo habitual de los despachos y pasillos de Son Moix que quizás los italianos de referencia han logrado vencer. O no. Que Take Kubo cuesta cuatro veces más que la mayoría, otra cosa es lo que vale,  ya lo sabíamos y que Hoppe es el que menos percibe, lo cual no equivale siempre al peor pagado, nos lo imaginábamos. Lástima que las nóminas desveladas todavía no incluyan la del joven Leo Román.