Test de nivel

Los lunes están para iniciar semanas, no para terminar jornadas. Los clubs acatan el invento que no ha demostrado ventaja alguna ni siquiera para las emisoras de televisión. Ellos sabrán. En esta oportunidad ha pesado el hecho de que el Athletic tuviera que cumplir con la Europa League el pasado jueves. Son preceptivos tres días de descanso, aunque eso se respeta cuando conviene. Más o menos como la interpretación de las tarjetas que no le muestran a Vinicius. Entre paréntesis.

Aun así, se especula con la intención de Ernesto Valverde de tirar o no de rotaciones. No importa mucho pues su plantilla dispone de recursos más que suficientes para competir al nivel que pregonan tanto sus resultados como su clasificación. Aguirrezabala cubre bajo palos la ausencia de Unai Simón, como Gorosábel o DeMarcos uno de los flancos y Yuri o Lekue, el otro. Vivian o Yeray en el centro y Ruiz de Galarreta, bien conocido, admirado y añorado en Palma, conduce la gabarra en cuya proa embiste Guruzeta, con nada menos que los hermanos Williams a babor y estribor. La espina dorsal la completan Sancet o Berenguer, aptos para cualquier misión.

Los leones del «Txingurri» vienen con un target muy parecido al del Mallorca que, como visitante, ha ganado un partido más. Los números en defensa o ataque son similares, aunque el paisaje previo a la batalla dibuja diferencias a dirimir en relación a la rapidez, el ritmo, la intensidad y, sobre todo, el acierto. Nada nuevo o inesperado.

La baja por lesión de Takuma Asano no constituye novedad, tampoco la del tercer portero, Cuéllar. Arrasate tiene la última palabra y en su cabeza la decisión de insistir con los que batieron el cobre frente al Rayo Vallecano o introducir algún relevo en base a las características del visitante.

En juego, la quinta posición de la tabla. Por mucha revancha copera que haya quien desee invocar, el pasado nada representa y mucho menos aporta, salvo el aprendizaje que, en este caso, carece de elementos desconocidos. De haberlos estarían en la hoja de servicios del Mallorca y no de la del postrer vencedor de aquella cita.

José Martínez Munuera, el policía local de Benidorm, sancionará las transgresiones del reglamento. Internacional, este año ya ha pitado el Bayern-Dinamo (9-2), es uno de los veteranos en Primera sino el que más, 12 temporadas. En la anterior solamente visitó Palma hacia el final (1-0 con Las Palmas), bastante más permisivo con los visitantes que con los locales en aquella ocasión. No es muy tarjetero, una media de cinco por encuentro, si bien en sus cinco actuaciones precedentes ya ha sacado dos rojas.