Análisis precipitados

No se nos podrá tachar de oportunistas cuando dijimos que el fichaje de Sergio Rico en el mercado del mes de enero iba a coaccionar la proyección del joven Leo Román. Hay quienes ahora observan que la incorporación del portero sevillano no ha aportado nada esencial ni ha cambiado el rendimiento de una defensa que, con Russo o sin él, ha ofrecido facilidades que continúa acusando pese a la reaparición de Raillo.

De pronto podemos encontrarnos con algo parecido respecto a otro de los refuerzos, Muriqi. Por supuesto que el albano kosovar tiene unas carecterísticas diferentes a los otros cuatro, ¡si cuatro!, centro delanteros en plantilla. Da posibilidades por arriba,  sea de cabeza, y va a por todas en el área, si bien lejos de ella ya es otro cantar. También advertíamos en su prometedor debut que conviene no precipitarse en las valoraciones porque en un juego colectivo como es el fútbol comete un error quien emita análisis individuales. De ahí que futbolistas que asombran en un equipo determinado, fracasan en otro y viceversa. El dibujo, el sistema y los compañeros de viaje influyen decisivamente. Doce millones de traspaso son muchos, aunque también lo fueron los ocho ingresados por Budimir sea cual sea la estima que despierte en Pamplona.

No dudo de que no tardará en salir el francés Clement Grénier. Si gusta en su primer partido será un fenómeno que como no se le había contratado antes y si lo hace mal será un paquete y qué manera de tirar el dinero. Pues tampoco. Una vez más es preciso dar tiempo al tiempo antes de crear ídolos de barro o enterrar a seres muy vivos.