Los 10 nombres de oro en la historia del Mallorca (y 2)
Repito lo mismo que en mi blog de ayer al referirme a los presidentes. En resumen, no voy a abrir ningún debate al respecto ya que si abriéramos una encuesta al respecto saldrían tantas alineaciones como gustos, además de simpatías y recelos, odios y venganzas. La mía es solo mi opinión, consciente de que habrá quienes estén de acuerdo y quienes no.
Juan Carlos Lorenzo. El entrenador argentino llegó de la mano del tándem Rosselló-Lafuente para coger al Mallorca en tercera división y lo ascendió a Primera en dos temporadas. Su primer año también fue jugador, llevaba el número 10 a la espalda. Estuvo tres temporadas. Puso al club en el mapa del fútbol español y a si mismo, hasta el punto de recalar, tiempo después, en el Atlético de Madrid. Hizo algo más que construir los cimientos.
Antonio Oviedo Saldaña. Fichó muy joven como jugador, procedente del Sevilla. Entre el anterior y él pasaron demasiadas cosas, demasiados fracasos, demasiados engaños y dirigentes más ávidos de popularidad que de buena gestión y mallorquinismo profundo. Empezó a entrenar en el primer partido de la temporada, con Miguel Contestí al mando y con un cóctel de jugadores sin pedigrí y repescados de donde se podía, algunos debido a su reclutamiento militar y alojados en el CIR 14. Tuvo que empezar desde cero y componer de la nada un equipo con el que levantó resultados y afición. Lo rescató del olvido, lo ascendió de Tercera a Segunda B y luego a Segunda consecutivamente. Fue cesada una nochebuena mediante una llamada telefónica cuando se encontraba cenando con su familia. Se quedó a vivir en Palma y siempre se consideró un mallorquín más, hasta su fallecimiento a los 83 años de edad.
Llorenç Serra Ferrer. De la cantera de Sa Pobla, ascendió de categoría a la U.D.Poblense. Miquel Contestí lo había fichado para entrenar al filial, pero en la temporada 1985-86 subió al primer equipo en sustitución de Benito Joanet, quien había sido despedido tras la octava jornada. Selló su debut con una victoria en Oviedo (1-2) y conquistó el ascenso a primera división después de ganar en Las Gaunas al Logroñés. Fue su primer éxito. El segundo en la temporada siguiente al clasificarse en un play off para el título de liga. El tercero al alcanzar la final de la Copa del Rey por primera vez en los anales del club en la que el Mallorca perdió por 1-0 ante el Atlético en una final celebrada en Madrid. Y su su segundo ascenso, al derrotar al Espanyol en la promoción. Ha sido el entrenador mallorquín más destacado ya que en su curriculum figura haber entrenado al Barça, donde también ocupó otros cargos, al Real Betis, del que fue director deportivo y accionista o, en el plano internacional, al AEK de Atenas, que fue subcampeón de su liga.
Héctor Cúper. El Mallorca le sirvió de trampolín para saltar a Europa y al resto del mundo. Su fichaje fue una imposición de Antonio Asensio Pizarro de la mano de Joaquín Domingo Martorell, cara visible de Bahía Producciones, una agencia de representación de futbolistas. Desconocido por estos lares pese a su trayectoria al frente de Lanus, un equipo modesto de Argentina, destacó por su seriedad, exigencia y afán competitivo. De carácter hermético no se prodigaba en los medios de comunicación, ni tampoco se mostraba muy locuaz con los jugadores. En su primera temporada clasificó al equipo en quinta posición y cuarto en la siguiente. Fabricó a un Mallorca muy difícil de batir, muy armado en defensa y eficaz de cara a portería. Al siguiente año acabó en cuarta posición y disputó la final de la Copa del Rey contra el Barcelona en Mestalla. Los catalanes ganaron en la tanda de penaltis. Se vengó al ganar la Supercopa de España. Llamó la atención de clubs más grandes y fichó por el Valencia, al que metió en competiciones europeas y por Inter de Milan. Acaba de ser seleccionador de Siria, después de diversas aventuras similares en países como Georgia, Egipo o el Congo. Reside en Palma
Luis Aragonés. Otro fichaje ordenado por Antonio Asensio Pizarro. El llamado «Sabio de Hortaleza», el barrio madrileño donde nació, fue jugador de varios equipos, Betis o Atlético, y también entrenador de los mismos, así como del Barça, Sevilla, Espanyol, Valencia….,etc. Antes de venir a Palma estaba en el Real Oviedo que le había fichado para evitar el descenso. Su llegada no fue muy celebrada, pero muy pronto calló la boca de no pocos. Sincero y directo como nadie, siempre contó con el respeto y el apoyo de los jugadores y mantuvo a raya, con argumentos, a informadores hostiles y de poca monta. En su primer año alcanzó la mejor clasificación histórica del Mallorca, tercero, clasificándolo para la Champions. Pero Jesús Gil le llama tras descender el Atlético, club de sus amores, y se marcha. Regresa tras devolver a los colchoneros a Primera y regresa a Palma dos temporadas después para salvar al Mallorca de bajar a Segunda. Abandona el club ante la llamada de Angel Villar para convertirle en seleccionador y conquistar la Eurocopa. Serra Ferrer le ofrecería volver a Palma, pero declinó la propuesta. Sin embargo el ciclo de la historia se entrelaza con el destino: El «Zapatones» inició su carrera como entrenador en el Vicente Calderón en la temporada 1974-75 sustituyendo a……….Juan Carlos Lorenzo.