Nadar y guardar la ropa

Un gol de Ariday al minuto de juego y un penalti sobre Lago Jr. en el 18, sentenciaron a un Alcorcón que dominó durante toda la segunda parte sin traducción en el marcador. La expulsión de Budimir por doble amarilla con 25 minutos por delante, no justifica el retroceso de los de Vicente Moreno el día en que debutaron Leo Suárez y Stoijiljovic y en el que intervino Reina para evitar la remontada visitante.

ALINEACIONES:

R.Mallorca.- Reina (2), Sastre (1), Xisco Campos (1), Raillo (2), Estupiñán (1), Baba (1), D.Rodriguez (1), Ariday (1), «Stoichkov» (1), Lago Jr. (1) y Budimir (1).

Minuto 60, Leo Suárez (1), por «Stoichkov». Minuto 72, Stoijlijcovik (0) por Ariday. Minuto 84, Pedraza (-) por D.Rodríguez.

Alcorcón.- Dani (1), Laure (0), H.Rodas (0), Elguezábal (1), Bellvis (1), Dorca (1), Toribio (1), Sangalli (0), Nono (2), Víctor (1), J.Muñoz (1).

Minuto 41, David Fernández (1) por H.Rodas, lesionado. Minuto 45, Aly (1) y B.Galán (1) por Laure y Sangalli.

ARBITRO:

Soto Grado (2), del comité de la Rioja. Siguió el juego de cerca y cometió pocos errores, pese a las protestas. Mostró tarjetas amarillas a Sastre y Baba, del Mallorca y a Víctor, Nono y Toribio del Alcorcón. La roja a Budimir por doble gualda en el minuto 68.

GOLES:

Minuto 1, internada de Estupiñán hacia el área enemiga y centro al segundo palo donde Ariday recibe a la espalda de Bellvis y marca de tiro raso y cruzado. 1-0

Minuto 18, Lago Jr. entre en el área por delante de Laure, que la traba junto a la línea de fondo. Penalti que transforma Budimir a lo «panenka». 2-0

COMENTARIO:

Gregorio Manzano afirmaba que, en la víspera, visualizaba cómo sería el partido del día siguiente. Ignoro si el entrenador del Alcorcón habría trazado sus planes de acuerdo con su propia premonición, pero si al minuto de juego encajas un gol probablemente tengas que replantear tus pensamientos. Cristóbal Parralo se pasó toda la primera parte en babia, contemplando como toda su banda derecha había hecho aguas ante la mayor potencia de Estupiñán, artífice aunque no autor, del primer tanto y Lago Jr., que provocó el penalti de un atribulado y veterano lateral, Laure, que sentenciaba el resultado cuando apenas se había sobrepasado el primer cuarto de hora.
A partir de ahí, el guión original. El Alcorcón justificaba su decadencia de resultados y clasificación, con un equipo plagado de veteranos y sin mayor exigencia ni ambición y el Mallorca acomodaba el texto a sus intereses. La rectificación llegó muy tarde, tras el descanso. Los alfareros cambiaron en su totalidad el ala diestra y la precedente lesión de unos de sus centrales le dejaba sin posibilidad de un tercer relevo durante la mitad de tiempo que todavía quedaba. Aun así lo intentaron y más allá de las clamorosas ocasiones que ni Budimir, ni Soijlijkovic marraron delante de un portero batido, Reina tuvo que trabajar a destajo para desbaratar las oportunidades creadas por un visitante que si antes había carecido de pegada, después lo hizo de puntería.
Porque la matinal de Son Moix tuvo dos lecturas. La positiva, resultado aparte, es que nadie se acordó de Salva Sevilla, ausente por sanción. Más preocupante es el toque de retreta aplicado en cuanto el marcador se pone a favor, dejando al rival la pelota y el terreno, ocasionalmente incluso el espacio, con el riesgo que ello comporta. Superado el descanso el color amarillo de los jugadores madrileños recordó demasiado al del Cádiz y el fantasma de la remontada, aun siendo solo etéreo, nos devolvió la imagen de este conjunto local más frágil en defensa de lo que señalan los goles encajados.
No todas las plantillas tienen mimbres para contener al adversario mediante una amplia posesión del balón, pero cederlo por sistema confiando en su capacidad de resistencia no siempre funciona. No lo hizo en el Ramón de Carranza en superioridad numérica, ni tampoco con uno menos a raíz de la expulsión de Budimir. Seguro que ni Vicente Moreno ni su oponente lo habían imaginado así.