Una fábrica sin stock
Abramos un paréntesis para mirar hacia abajo aunque este ejercicio no sea especialmente recomendable, más que nada para evitar que a uno no le guste lo que ve. Ya hemos comentado anteriormente la dejadez, el evidente desinterés de los propietarios y ejecutivos del Mallorca en relación al fútbol formativo. Nada nuevo. Pero el pasado lunes me reenviaron un post creo que del señor Xesc Ramis en el que se leía: «Hoy ha debutado con el Mallorca B un jugador de 26 años en Tercera Federación. Muy normal no me parece». A mi tampoco, pensé de inmediato.
El filial que entrena y juega en el desierto de Son Bibiloni ni siquiera lidera el grupo balear de la categoría a pesar de que sus equipos más fuertes, Poblense y Porreres, subieron el peldaño que los chicos a las órdenes de Siviero, no sé si de Gelabert y Ortells también, de este último no creo, han bajado. Siendo un mal dato, no es el peor.
El último futbolista que, procedente de la cantera, ha sido titular en el primer equipo es Leo Román. Lo ha logrado cinco años después de su llegada procedente de Eivissa y tras un año intermedio cedido al Real Oviedo, donde si jugó 46 partidos, en el tercero de dicho lustro. Esta temporada se han quedado en la Isla David López, también prestado al Elche sin pena ni gloria, y Javi Llabrés, de poco rédito en el Mirandés o el Eldense de Oltra, sin que ninguno de ellos apunte a mucho más de lo que hemos visto. Ojalá nos equivoquemos.
Dani Luna, renovado recientemente, tampoco triunfó en Miranda de Ebro e igual que Llabrés en Elda, vivió el descenso del Cartagena. Ahora defiende los colores del Huesca, casi siempre en liza, pero muy pocos partidos completos. Nos queda Jan Salas, al que Arrasate hizo debutar en Primera, que no juega ni el partidillo de los jueves en el Córdoba, décimo tercer clasificado de Segunda tras las primeras nueve jornadas.
Estos datos me inclinan a deducir que el seguimiento que se hace desde el club a sus jóvenes promesas es ninguno. Tal vez por eso ha habido que pescar en la cantera del Barça ante la pobre calidad de los productos de la Ciudad Deportiva Antonio Asensio. Ninguna sorpresa, solo una prueba más de la falta de ese proyecto inexistente que nos pretenden vender el presidente Kohlberg y sus hombres de confianza, la suya, Díaz y Ortells.
mallorcainforma.com avidalonline.blogspot.com facebook Twitter (X) Linkedin
