¡Vienen los Williams!
Al margen de las dificultades que puede presentar los equipos en peligro de descenso, la visita del Athletic posiblemente sea la más complicada para el Mallorca en lo que queda de liga.
Ernesto Valverde ha sacado el máximo de una plantilla con algunas individualidades interesantes, como las de los hermanos Williams o Muniaín, el catalizador de su juego y baja segura, a la que ha llevado a luchar por su clasificación para la Europa League, a rueda de un Betis en duda y con Osasuna, la revelación, a su espalda. Una opción que depende en buena medida del resultado que se dé en Son Moix.
Los míticos «leones» han cosechado más victorias que derrotas en sus desplazamientos, seis contra cinco, no en vano son el quint mejor visitante de la competición, el tercero más goleador y el sexto menos goleado, indicativo de un contragolpe peligroso y una cobertura menos indeleble. Con Unai bajo palos, Vivian o Yeray acompañan a Iñigo Martínez, dicen que objetivo del Barça para la próxima temporada, con De Marcos y Yuri o Balenciaga en los laterales. Más competencia se da en la línea media, un doble pivote por el que se alternan Unai Gómez, Vesga, Zárraga o Dani García. Berenguer en uno de las bandas, Nico en la otra y, ausentes el capitán y Sancet, podrían salir Iñaki y Guruzeta o quizás conceder galones a Ander Herrera. Son muchas las combinaciones posibles.
El Mallorca no es fácil de sorprender a la contra. Como decía Quique Sánchez Flores no tiene secretos, lo cual no significa que resulte sencillo contrarestar sus recursos. Con Raillo y Valjent recuperados, la línea defensiva podrá incluir sus nombres habituales. Falta descifrar quién formará junto a Galarreta, enfrentado a su próximo equipo, con Dani y Kang-in Lee en sus puestos por detrás del inamovible Muriqi.
Pita Figueroa Vázquez, de Sevilla. Arbitró al Mallorca en el Bernabéu (4-1) y al Athletic en San Mamés contra el Atlético (0-1). Cumple su tercera temporada en primera división y le quedan dos años para cumplir los 45, edad protocolaria de retirada. Una media digamos que normal de amarillas, pero 5 rojas en 15 partidos no son pocas. Muy irregular.